Ya llevamos una semana del Taller de Versos Antiguos para Niños Modernos. Una semana en la que más de 80 niños y niñas han jugado con nosotros y con los versos. Una semana plena de satisfacción al comprobar un año más la ilusión que todos ponemos, al ver como un año tras otro muchas caras se repiten, y como se incorporan nuevas que al terminar los talleres se van con la sonrisa puesta.
DULCES VERSOS
En
dulces versos creamos un pastel con versos comestibles. Ellos montan la nata,
elaboran la crema de trufa, empapan en almíbar los bizcochos, usan las mangas
pasteleras y barnizan los versos.
¿Pero
este papel se come? – nos preguntan. Sí, se come. Son dulces versos. Versos de
amor de W. Shakespeare en Romeo y Julieta:
Mis
labios,
peregrinos
ruborizados,
quisieran
hacer penitencia
con
un dulce beso.
Uno
de los momentos que más les llama la atención es cuando Kiko, nuestro
repostero, le da la vuelta al recipiente de la nata. Se apartan pensando que
les va a llenar de ella. Y quizá lo que más les guste es manosear los
bizcochos, experimentar con las texturas y los sabores.
DIRECTOS AL CORAZÓN
Sor
Juana Inés de la Cruz vuelve a tener un espacio entre nosotros un año más. Y es
que su producción literaria no tiene desperdicio. Para “Directos al corazón”
hemos elegido los siguientes versos:
Amor
empieza por desasosiego,
solicitud, ardores y desvelos;
crece con riesgos, lances y recelos;
susténtase de llantos y de ruego.
solicitud, ardores y desvelos;
crece con riesgos, lances y recelos;
susténtase de llantos y de ruego.
A partir de aquí
jugamos con los corazones de papel, elaboramos un pop-up y declamamos los
versos barrocos.
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