Parace que los panes de Iván Plademunt nos inspiran bastante pues este es el tercer GASTROCUENTO que
nace de una de sus recetas de pan. Esto de los cuentos y las recetas es lo que
tiene que nunca sabemos por dónde van a salir.
PAN DE LAVANDA
¡Papá!, ¡No te
vayas!- le dijo su hijo desde la cuna.
No me voy, mi amor–
dijo el padre apagando la luz.
Velaré tu sueño–
añadió.
Se tumbó en el suelo
junto a la cuna y el pequeño le pidió la mano. Y él se la dio. Y amasó sus
dedos, y repasó las finísimas líneas de la palma y se le cerraron los ojos. Y
soñó con las manos de su abuelo, con los veranos en la masía, con los paseos
para recoger lavanda junto a su yaya.
Mientras, desde la
cuna, su pequeño hijo velaba su sueño.
Manuel Castaño.
Ya sabes que puedes compartir tanto la
receta como los cuentos. Y que si haces la receta nos gustará saber como te
supo.
1 comentario:
Muy bonito el cuento , tierno y amoroso... Como ese pan . Enhorabuena��
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